Hilo rojo
Cuenta la leyenda, que las personas que están destinadas a estar juntas se encuentran unidas por un hilo rojo en su dedo meñique, independientemente del momento en el que se conozcan. Ese hilo puede enredarse, estirarse, contraerse, desgastarse... pero nunca puede romperse, y será símbolo de amor entre las dos personas. Se trata de una creencia oriental, presente en la mitología china y japonesa.
Una de las leyendas japonesas más famosas cuenta que un emperador encomendó a una hechicera la labor de seguir su hilo rojo para, de esta forma, conocer a la mujer que estaba predestinada para él. La búsqueda les llevó hasta un mercado, donde una campesina portaba un bebé en brazos. El emperador, enfurecido, se negó a creer que ese fuera su destino y esa la mujer que estaba entrelazada con él. Así que, pensando que la hechicera se burlaba de él, empujó a la campesina provocando la caída de la bebé de brazos de su madre hiriéndola de esta manera en la frente. Sin embargo, años después, cuando llegó el momento en el que el emperador debía casarse, le recomendaron la hija de un gran general, ¿pero cuál fue su sorpresa el día de la boda? Su futura mujer tenía una cicatriz en la frente fruto de una caída siendo bebé.
No obstante, los japoneses no limitan este hilo (conexiones) simplemente al amor de pareja, sino que vienen a determinar todo tipo de relaciones con significado, como pueden ser las amistades. Todo está predeterminado, nada es fruto del azar. Ese hilo te acompaña desde el momento del nacimiento y guía tu camino a lo largo de todo tu ciclo vital, poniendo en él a aquellas personas con las que te tienes que encontrar, pero, ¿cómo sabrás que esa persona es LA PERSONA? Cuando encuentres a la persona a la que realmente estás unida tendrás sentimientos de paz interior y alegría.
Sin embargo, ¿qué hay o puede haber de cierto en esta creencia? Me gustaría contar una anécdota. El primer día de baloncesto de mi hijo (9 años) viene y me dice, "mami he conocido a un chico en el entrenamiento, ya tengo un amigo". Desde ese día existe en ellos cierta complicidad. Pero la sorpresa viene cuando le llevo al entrenamiento y me dice, "mira mami, ese niño es", y le digo, "¿tú sabes quién es ese niño? Ese niño y tú, ibais juntos a la guardería". Si la leyenda del hilo rojo no es cierta, al menos a mí me despierta la curiosidad, porque si tenemos en cuenta el refranero español:
Pensad en todas las personas que conocéis y tenéis a vuestro lado, ¿qué sentimientos os provocan? Ahí tenéis la respuesta... Enjoy Life...
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